Después de que un equipo de cirujanos acabaran con la vida de su esposa durante una chapucera intervención quirúrgica, el Dr. Phibes (Vincent Price), un diabólico personaje, asesina a varios médicos con métodos horribles, todos ellos sacados de antiguas escrituras. El detective de Scotland Yard, Troute (Peter Jeffrey), está tras su pista con la ayuda del doctor Vesalius (Joseph Cotten), el jefe del equipo médico del que formaban parte los asesinados, y a los que Phibes responsabiliza de la muerte de su mujer.