A los cuarenta años, Miriam es muy guapa y tiene una confianza y una seguridad tan amplia como el mar que linda su casa de verano. No hay ningún tabú en la vida que comparte con André, su novio, y su hijo de 15 años, Nils. Todo es comprensión y tolerancia. Cuando Nils invita a su novia de doce años, Livia, a pasar las vacaciones con ellos, no hay ningún problema. Pero cuando la descarada y sensual Livia empieza a flirtear con Bill, un hombre mayor, Miriam decide acabar con esa relación dudosa.