Cuando Rosario llega a buscar a Sigifredo en la fiesta con el fin de avisarle que su hija estaba en el hospital lista para dar a luz, la mariachi se da cuenta de que Virginia está sentada en las piernas de Francisco (Emiliano). Estando en el taxi, Sigifredo le comenta a Rosario que la razón por la cual estaban con Virginia y sus amigas era por una encerrona que la hija de don Carlos planeó. Más tarde, Rosario llama a su madre y para no preocuparla le dice que ella se encuentra con Francisco, sin embargo, Raquel sabe que le miente ya que él se encuentra fuera de su casa esperándola. Al ver al mexicano en su puerta, Raquel recuerda las noches en las que su marido esperaba ebrio en el andén a que le abriera la puerta. Por otro lado, en México, los supuestos amigos e Emiliano continúan planeando cómo terminar de hundir a Francisco.