Atenea está a punto de morir. Seiya piensa utilizar la flecha de Sagitario, pero Poseidon le advierte que la flecha se volverá contra el. Seiya no hace caso y la flecha se clava en su pecho, así como en la espalda de Shina y después el pecho de Shiryu quienes le protegieron en sus tres intentos, respectivamente. Ahora también Hyoga y Shun se les unen para que la flecha dorada posea sus cosmos y la lanzan a Poseidón. La flecha que arde en cosmos da en la frente de Poseidon que queda impactado ante el golpe y la herida. Ahora Poseidon está despierto por completo. Ikki con ayuda de Sorren y el escudo de la armadura de Libra destruye el pilar del Atlántico Norte. Ahora las armaduras de Acuario y de Libra cubren a Hyoga y Shiryu. Los tres Caballeros, ahora con armaduras doradas, deben destruir el pilar centralal y derrotar a Poseidon, quien ha despertado por completo como Dios, ahora con su tridente en mano y un cosmos con una energía que lo cubre todo, según Seiya 100 veces mayor al anterior detectado, se disponen a poner punto final en la guerra santa contra Atenea.