Cuando la pandilla acompaña a Rias en su trabajo para verificar si un ataúd egipcio está maldito, Issei queda poseído por la momia, un mago egipcio llamado Unas, que está casi tan pervertido como Issei. Unas afirma que solo lo liberará si eliminan la maldición que lo ata, para lo cual necesita cosas como Rias bailando en un atuendo escaso, un beso de Asia y frotando su rostro sobre los pechos y el cabello de Akeno.