Fiti consulta a una adivina sobre su futuro. Esta predice un robo en la taberna y, pese a las ironías de Diego y Fiti, el presagio se cumple. Fiti se asusta porque la pitonisa lee en su mano que no tenía hijos y que Diego tenía cuatro varones. Atando cabos, Fiti llega a la conclusión de que Diego puede ser el padre de Raúl, fruto de aquella ocasión en la que Diego tuvo un affaire con Candela.